Un sábado de brujas es una supuesta reunión de aquellos que se cree practican la brujería y otros rituales . La frase se hizo popular en el siglo XX.
Orígenes
Aparición en el siglo XX
Antes de finales del siglo XIX, es difícil encontrar algún uso inglés del término sabbath para denotar una reunión de brujas. La frase es utilizada por Henry Charles Lea en su Historia de la Inquisición de la Edad Media (1888). [1] Escribiendo en 1900, el historiador alemán Joseph Hansen, corresponsal y traductor alemán de la obra de Lea, utiliza con frecuencia la frase hexensabbat para interpretar los registros de juicios medievales, aunque cualquier término que se repita constantemente es notablemente raro en las abundantes fuentes latinas que Hansen también proporciona (ver más sobre varios sinónimos latinos, a continuación). [2] La influencia de Lea y Hansen puede haber llevado a un uso más amplio de la frase taquigráfica, incluso en inglés.
Antes de Hansen, el uso alemán del término también parece haber sido raro y la compilación del folclore alemán por Jakob Grimm en el siglo XIX ( Kinder und HausMärchen, Deutsche Mythologie ) parece no contener ninguna mención de hexensabbat o cualquier otra forma del término sabbat. relativo a las hadas o actos mágicos. [3] El contemporáneo de Grimm y el primer historiador de la brujería, WG Soldan tampoco parece usar el término en su historia (1843).
Una conexión francesa
En contraste con sus contrapartes alemanas e inglesas, los escritores franceses (incluidos los autores francófonos que escriben en latín) ocasionalmente usaron el término y parece haber raíces en la persecución inquisitorial de los valdenses . En 1124, el término inzabbatos se utiliza para describir a los valdenses en el norte de España. [4] En 1438 y 1460, los inquisidores franceses utilizaron términos aparentemente relacionados sinagogama y sinagoga de Sathan para describir a los valdenses. Estos términos podrían ser una referencia a Apocalipsis 2: 9. (... "Conozco la blasfemia de los que dicen ser judíos y no lo son, pero son la sinagoga de Satanás ".) [5] [6] Escribiendo en latín en 1458, el autor francófono Nicolas Jacquier aplica sinagogam fasciniorum a lo que él considera una reunión de brujas. [7]
Aproximadamente 150 años después, cerca del pico de la fobia a las brujas y las persecuciones que llevaron a la ejecución de aproximadamente 40.000-100.000 personas, [8] [9] con aproximadamente el 80% de mujeres, [10] [11] la bruja -Los escritores franceses y francófonos con fobia todavía parecen ser los únicos que utilizan estos términos relacionados, aunque todavía con poca frecuencia y esporádicamente en la mayoría de los casos. Lambert Daneau usa sabbatha una vez (1581) como Synagogas quas Satanica sabbatha . [12] Nicholas Remi usa el término ocasionalmente así como synagoga (1588). Jean Bodin usa el término tres veces (1580) y, al otro lado del canal, el inglés Reginald Scot (1585) que escribe un libro en oposición a la fobia a las brujas, usa el término pero solo una vez al citar a Bodin. (El puritano Richard Baxter que escribe mucho más tarde (1691) también usa el término solo una vez exactamente de la misma manera, citando a Bodin. Otros puritanos ingleses con fobia a las brujas que fueron contemporáneos de Baxter, como Increase y Cotton Mather (1684, 1689, 1692), no usaron el término, tal vez porque eran sabadistas .)
En 1611, Jacques Fontaine usa sabat cinco veces escribiendo en francés y de una manera que parece corresponder con el uso moderno. Finalmente, al escribir una obra sobre fobia a las brujas en francés al año siguiente (1612), Pierre de Lancre parece usar el término con más frecuencia que nadie antes. [13]
Más de doscientos años después de Pierre de Lancre, otro escritor francés, Lamothe-Langon (cuyo carácter y erudición fueron cuestionados en la década de 1970) usa el término en (presumiblemente) traducir al francés un puñado de documentos de la inquisición en el sur de Francia. Joseph Hansen citó a Lamothe-Langon como una de las muchas fuentes.
Un término favorecido por traductores recientes
A pesar de la poca frecuencia del uso de la palabra sábado para denotar tales reuniones en el registro histórico, se hizo cada vez más popular durante el siglo XX.
Cautio Criminalis
En una traducción de 2003 de Cautio Criminalis (1631) de Friedrich Spee , la palabra sabbaths aparece en el índice con un gran número de entradas. [14] Sin embargo, a diferencia de algunos de los contemporáneos de Spee en Francia (mencionados anteriormente), quienes ocasionalmente, aunque raramente, usan el término sabbatha , Friedrich Spee nunca usa palabras derivadas de sabbatha o synagoga . Spee hablaba alemán y, como sus contemporáneos, escribía en latín. Conventibus es la palabra que Spee usa con mayor frecuencia para denotar una reunión de brujas, ya sea supuesta o real, física o espectral, como se ve en el primer párrafo de la pregunta uno de su libro. [15] Esta es la misma palabra de la que se derivan las palabras en inglés convención , convento y coven . Cautio Criminalis (1631) fue escrito como un apasionado proyecto de inocencia. Como jesuita, Spee se encontraba a menudo en la posición de presenciar la tortura de los acusados de brujería.
Malleus Maleficarum
En una traducción de 2009 del algo influyente Malleus Maleficarum (1486) del inquisidor dominico Heinrich Kramer , la palabra sábado no aparece. Una línea que describe una supuesta reunión y usa concionem se traduce con precisión como una reunión . Pero en la nota a pie de página adjunta, el traductor parece disculparse por la falta tanto del término sábado como por la escasez generalizada de otras reuniones que parecen encajar en lo que él llama un "sábado negro". [dieciséis]
Arte fino
La frase también es popular en traducciones recientes de títulos de obras de arte, que incluyen:
- El sábado de las brujas de Hans Baldung (1510)
- El sábado de las brujas de Frans Francken (1606)
- El sábado de las brujas en las ruinas romanas de Jacob van Swanenburgh (1608)
- Como traducción reciente del original español El aquelarre al título en inglés Witches 'Sabbath (1798) y Witches' Sabbath o The Great He-Goat (1823) ambas obras de Francisco Goya.
- Musa de la noche (sábado de las brujas) de Luis Ricardo Falero (1880)
Exactitud controvertida de las cuentas de las reuniones
Los investigadores modernos no han podido encontrar ninguna corroboración con la noción de que ocurrieron reuniones físicas de practicantes de la brujería. [17] El historiador Scott E. Hendrix presenta una doble explicación de por qué estas historias se contaban con tanta frecuencia a pesar del hecho de que los sábados probablemente nunca ocurrieron en su estudio "La persecución de las brujas y el discurso sexual del Sabbat". " En primer lugar, la creencia en el poder real de la brujería creció durante la Europa de finales de la Edad Media y principios de la Edad Moderna a medida que ganaba terreno una visión doctrinal en oposición al canon Episcopi en ciertas comunidades. Esto alimentó la paranoia entre ciertas autoridades religiosas de que había una vasta conspiración clandestina de brujas decididas a derrocar al cristianismo. Las mujeres más allá de la edad fértil eran un blanco fácil y se las culpaba de las hambrunas, las plagas, las guerras y otros problemas. [17] Tener elementos lascivos y orgiásticos ayudó a asegurar que estas historias se transmitieran a otros. [18]
Elementos rituales
Ronald Hutton de la Universidad de Bristol ha encapsulado el sábado de las brujas como una construcción esencialmente moderna, diciendo:
[Los conceptos] representan una combinación de tres componentes míticos más antiguos, todos los cuales están activos por la noche: (1) Una procesión de espíritus femeninos, a menudo acompañados por seres humanos privilegiados y a menudo dirigidos por una mujer sobrenatural; (2) Un cazador espectral solitario, considerado demoníaco, maldito o de otro mundo; (3) Una procesión de los humanos muertos, que normalmente se cree que vagan para expiar sus pecados, a menudo ruidosa y tumultuosa, y generalmente compuesta por aquellos que habían muerto prematura y violentamente. El primero de ellos tiene orígenes precristianos y probablemente contribuyó directamente a la formulación del concepto del sábado de las brujas. Los otros dos parecen ser medievales en sus inicios, y el tercero está directamente relacionado con la creciente especulación sobre el destino de los muertos en los siglos XI y XII " [19].
El libro Compendium Maleficarum (1608) de Francesco Maria Guazzo ilustra una visión típica de la fobia a las brujas de la reunión de brujas como "los asistentes montando cabras voladoras, pisoteando la cruz y siendo rebautizados en el nombre del Diablo mientras dan su ropa a él, besando su trasero y bailando espalda con espalda formando una ronda ".
En efecto, el sabbat actuó como un truco de "publicidad" eficaz, lo que hizo que el conocimiento de lo que estas autoridades creían que era la amenaza muy real de la brujería se extendiera más rápidamente por todo el continente. [17] Eso también significó que las historias del sabbat promovieron la caza, el enjuiciamiento y la ejecución de supuestas brujas.
Las descripciones de los Sabbats fueron hechas o publicadas por sacerdotes, juristas y jueces que nunca participaron en estas reuniones, o fueron transcritas durante el proceso de los juicios por brujería . [20] Que estos testimonios reflejen hechos reales es para la mayoría de los relatos considerados dudosos. Norman Cohn argumentó que estaban determinados en gran medida por las expectativas de los interrogadores y la libre asociación por parte de los acusados, y reflejan solo la imaginación popular de la época, influenciada por la ignorancia , el miedo y la intolerancia religiosa hacia los grupos minoritarios. [21]
Algunos de los relatos existentes del Sabbat se dieron cuando la persona que los relataba estaba siendo torturada , [22] y por lo tanto estaba motivada a estar de acuerdo con las sugerencias que se les hicieron.
Christopher F. Black afirmó que el escaso uso de la tortura por parte de la Inquisición romana permitió que las brujas acusadas no se sintieran presionadas a una acusación masiva. Esto, a su vez, significa que había menos supuestos grupos de brujas en Italia y lugares bajo influencia inquisitorial. Debido a que el sábado es una reunión de grupos colectivos de brujas, la falta de acusaciones masivas significa que la cultura popular italiana estaba menos inclinada a creer en la existencia del sábado negro. La misma Inquisición también tenía una visión escéptica sobre la legitimidad de las Asambleas del Sábado. [23]
Muchos de los elementos diabólicos del estereotipo del sábado de las brujas, como comer bebés, envenenar pozos, profanar hostias o besar el ano del diablo , también se referían a sectas cristianas heréticas, leprosos , musulmanes y judíos . [24] El término es el mismo que la palabra inglesa normal " Sabbath " (en sí misma una transliteración del hebreo " Shabat ", el séptimo día, en el que el Creador descansó después de la creación del mundo), refiriéndose al equivalente de las brujas al Día cristiano de descanso ; un término más común era "sinagoga" o " sinagoga de Satanás " [25], posiblemente reflejando un sentimiento antijudío, aunque los actos atribuidos a las brujas tienen poca semejanza con el sábado en el cristianismo o en las costumbres judías del Shabat . Los Errores Gazariorum ( Errores de los cátaros ), que menciona el Sabbat, aunque no discute el comportamiento real de los cátaros , lleva su nombre, en un intento de vincular estas historias a un grupo cristiano herético. [26]
La actitud de los misioneros cristianos hacia los cultos africanos no fue muy diferente en principio a su actitud hacia el sábado de las brujas en Europa; algunos relatos los vieron como una especie de sábado de las brujas, pero no lo son. [27] Algunas comunidades africanas creen en la brujería, pero al igual que en los juicios por brujería europeos, las personas que creen que son "brujas" son condenadas en lugar de aceptadas.
Posibles conexiones a grupos reales
Otros historiadores, incluidos Carlo Ginzburg , Éva Pócs , Bengt Ankarloo y Gustav Henningsen, sostienen que estos testimonios pueden dar una idea de los sistemas de creencias de los acusados. Ginzburg descubrió los registros de un grupo de personas en el norte de Italia, que se llamaban a sí mismos benandanti , que creían que salían de sus cuerpos en espíritu y luchaban entre las nubes contra los espíritus malignos para asegurar la prosperidad de sus pueblos, o se congregaban en grandes fiestas presididas por por una diosa, donde les enseñó magia y realizó adivinaciones. [24] Ginzburg vincula estas creencias con testimonios similares registrados en toda Europa, de los ejércitos de los Pirineos , de los seguidores de la Signora Oriente en el Milán del siglo XIV y los seguidores de Richella y 'la sabia Sibillia' en el norte de Italia del siglo XV, y mucho más lejos, de hombres lobo de Livonia , kresniki dálmata , táltos húngaros , căluşari rumano y burkudzauta osetio . En muchos testimonios, estas reuniones se describieron como sucesos extracorporales, en lugar de físicos. [24]
Papel de los alucinógenos de aplicación tópica
Los ungüentos mágicos ... producían efectos en los que los propios sujetos creían, incluso afirmando que habían tenido relaciones sexuales con espíritus malignos, habían estado en el Sabbat y bailado en el Brocken con sus amantes ... Las alucinaciones peculiares evocadas por la droga habían sido tan poderosamente transmitido desde la mente subconsciente a la conciencia que las personas mentalmente incultas ... creían que eran la realidad. [28]
Las investigaciones de Carlo Ginzburg han resaltado elementos chamánicos en la brujería europea compatibles con (aunque no invariablemente inclusivos) estados alterados de conciencia inducidos por drogas. En este contexto, un tema persistente en la brujería europea, que se remonta a la época de autores clásicos como Apuleyo , es el uso de ungüentos que confieren el poder de "volar" y "cambiar de forma". [29] Varias recetas de tales "ungüentos voladores" han sobrevivido desde los primeros tiempos modernos, lo que permite no solo una evaluación de sus probables efectos farmacológicos, basados en sus diversos ingredientes vegetales (y en menor medida animales), sino también recreación y experimentación con tales preparaciones a base de grasas o aceites. [30] Es sorprendente (dada la relativa riqueza de material disponible) que Ginzburg haga solo una de las referencias más fugaces al uso de enteógenos en la brujería europea al final de su análisis extraordinariamente amplio y detallado del sábado de las brujas. mencionando solo los hongos Claviceps purpurea y Amanita muscaria por su nombre, y limitándose a un solo párrafo sobre el 'ungüento volador' en la página 303 de 'Éxtasis ...':
En el día de reposo, los jueces veían cada vez con mayor frecuencia los relatos de acontecimientos físicos reales. Durante mucho tiempo, las únicas voces disidentes fueron las del pueblo que, refiriéndose al Canon episcopi , veía a las brujas y hechiceros como víctimas de la ilusión demoníaca. En el siglo XVI científicos como Cardano o Della Porta formulaban una opinión diferente: las metamorfosis de los animales, los vuelos, las apariciones del diablo eran el efecto de la desnutrición o el uso de sustancias alucinógenas contenidas en brebajes o ungüentos vegetales ... Pero ninguna forma de privación, ninguna sustancia, ninguna técnica extática puede, por sí sola, provocar la recurrencia de experiencias tan complejas ... el uso deliberado de sustancias psicotrópicas o alucinógenas, sin explicar los éxtasis de los seguidores de la diosa nocturna, el hombre lobo , etc. los colocaría en una dimensión no exclusivamente mítica.
- en resumen, un sustrato del mito chamánico podría, catalizado por una experiencia de drogas (o simple hambre), dar lugar a un "viaje al sábado", no del cuerpo, sino de la mente. El cornezuelo de centeno y el hongo agárico de mosca, aunque indudablemente alucinógenos, [31] no se encontraban entre los ingredientes enumerados en las recetas de la pomada voladora. Los ingredientes activos de tales ungüentos eran principalmente, no hongos, sino plantas de la familia de las solanáceas , más comúnmente Atropa belladonna (Deadly Nightshade) y Hyoscyamus niger (Beleño), pertenecientes a la tribu Hyoscyameae, rica en alcaloides de tropano . [32] Otros ingredientes de las solanáceas que contienen tropano incluyen la famosa Mandrake Mandragora officinarum , Scopolia carniolica y Datura stramonium , la Thornapple. [33] Los alcaloides atropina , hiosciamina y escopolamina presentes en estas plantas solanáceas no solo son alucinógenos potentes (y altamente tóxicos), sino que también son liposolubles y pueden ser absorbidos a través de la piel humana intacta. [34]
Ver también
- Akelarre
- Alice Kyteler
- Aradia
- Montaña calva (folclore)
- Blockula
- Éxtasis (libro)
- Ungüento volador
- Isobel Gowdie
- Märet Jonsdotter
- Sorginak
- Cacería de brujas
Referencias
- ^ El historiador estadounidense GL Burr no parece utilizar el término en su ensayo "La literatura de la brujería" presentado a la Asociación Histórica Estadounidense en 1890.
- ↑ Joseph Hansen Zauberwahn (1900) también véase el volumen complementario de fuentes Quellen (1901)
- ↑ Grimm, Kinder und HausMärchen (1843 ed, 2do volumen)
- ^ Phillipus van Limborch, Historia de la Inquisición (1692), traducción al inglés (1816) p. 88 , latín original aquí
- ↑ Hansen, Quellen (1901) p.186
- ^ Wolfgang Behringer, Witches and Witch-Hunts (2004)señala el versículo de Apocalipsis,p.60
- ↑ Nicolaus Jacquier Flagellum (impreso en 1581) p. 40
- ^ Alison Rowlands, Narrativas de brujería en Alemania, Rothenburg, 1561-1652 (Manchester, 2003), 10.
- ^ "... el miedo a una conspiración monstruosa de brujas adoradoras del diablo era bastante reciente, y de hecho la erudición moderna ha confirmado que las cazas de brujas masivas ocurrieron casi exclusivamente en el período moderno temprano, alcanzando su máxima intensidad durante el siglo 1570-1670. " Benjamin G. Kohl y HC Erik Midelfort, editores, Sobre la brujería, una traducción abreviada de De praestigiis daemonun de Johann Weyer. Traducción de John Shea (Carolina del Norte, 1998) xvi.
- ^ Según Scarre y Callow (2001), "Los registros sugieren que en Europa, en su conjunto, alrededor del 80 por ciento de los acusados fueron mujeres, aunque la proporción de mujeres y hombres acusados del delito varió de un lugar a otro y, a menudo, también, en un lugar a lo largo del tiempo ".
- ^ "Las mujeres menopáusicas y posmenopáusicas estuvieron desproporcionadamente representadas entre las víctimas de la locura de las brujas, y su sobrerrepresentación es más sorprendente cuando recordamos cuán raras deben haber sido las mujeres mayores de cincuenta años en la población en general". Lyndal Roper Witch Craze (2004) pág. 160
- ↑ El trabajo de Daneau se incluye con Jacquier en la impresión de 1581, enlace arriba. Ver pág. 242.
- ^ Pierre de Lancre p. 74
- ^ Traducción de Marcus Hellyer, (UVA Press, 2003) p.232.
- ^ Disponible aquí y también consulte la p. 398.
- ^ "A veces se argumenta que el Malleus tuvo una influencia menor en la difusión de la concepción de la hechicería como un culto satánico porque el sábado negro, que formó un elemento principal en las nociones posteriores de hechicería, recibe poco énfasis. el sábado se menciona claramente ... "- nota 74, Christopher S. Mackay, El martillo de las brujas, Una traducción completa de Malleus Maleficarum p. 283 fn. 74. El trabajo original con la línea a la que se refiere Mackay es la página 208 que se encuentra aquí .
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Otras lecturas
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- Summers, Montague (1926). La historia de la brujería .El Capítulo IV, El Sabbat tiene una descripción detallada del Sabbat de las Brujas, con citas completas de las fuentes.
- Robbins, Rossell Hope, ed. (1959). "Sabbat". La enciclopedia de brujería y demonología . Corona. págs. 414–424.Consulte también la extensa bibliografía de temas de la literatura primaria en la pág. 560.
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- Sharpe, James. (2013) "En busca del Sabbat inglés: conceptos populares de las reuniones de brujas en la Inglaterra moderna temprana. Revista de estudios modernos tempranos . 2: 161-183".
- Hutton, Ronald. (2014) "La caza salvaje y el sábado de las brujas". Folklore . 125, no. 2: 161-178.
- Roper, Lyndal. (2004) Witch Craze: Terror y fantasía en la Alemania barroca. - Ver Parte II: Fantasía Capítulo 5: Sábados
- Thompson, RL (1929) La historia del diablo, el dios cornudo del oeste, magia y adoración.
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- Ankarloo, Bengt y Gustav Henningsen. (1990) Brujería europea moderna temprana: centros y periferias (Oxford: Clarendon Press). ver los siguientes ensayos: pág. 121 Ginzburg, Carlo "Descifrando el sábado", pág. 139 Muchembled, Robert "Mitos satánicos y realidad cultural", pág. 161 Rowland, Robert. "Fantásticamente y Devilishe Persona: Creencias de brujas europeas en perspectiva comparada", pág. 191 Henningsen, Gustav "'Las damas del exterior': Un patrón arcaico del sábado de las brujas".
- Wilby, Emma. (2005) Gente astuta y espíritus familiares: tradiciones visionarias chamánicas en la brujería y la magia británica de la Edad Moderna . (Brighton: Prensa académica de Sussex)
- Garrett, Julia M. (2013) "Brujería y conocimiento sexual en la Inglaterra de principios de la era moderna", Revista de estudios culturales de principios de la era moderna 13, no. 1. pág. 32–72.
- Roper, Lyndal. (2006) "La brujería y la imaginación occidental", Transactions of the Royal Historical Society 6, no. 16. págs. 117-141.